Ayer, en un jardín infantil de Estación Central y tras regresar de su larga gira que lo llevó a Medio Oriente y Europa, el Presidente Sebastián Piñera firmó el proyecto de postnatal de seis meses, que hoy será enviado al Congreso para su discusión. La iniciativa, es parte de las principales promesas de campaña del Mandatario, y se une a otras que durante el primer año de gobierno se vieron materializadas.
Aquí, señalan en RN y la UDI, se adiciona la Reforma Educacional ya aprobada en el Parlamento y que busca mejorar la educación pública y preescolar y fortalecer la carrera docente.
En esta línea, agregan, se suman los esfuerzos del Ejecutivo para combatir la delincuencia, una de las líneas centrales del programa de gobierno de Piñera. Aquí se destacan la promulgación de la ley que crea el Ministerio del Interior y Seguridad Pública y la "nueva mano" que ha impulsado el ministro Rodrigo Hinzpeter, clave en la disminución de las cifras (encuesta Paz Ciudadana-Adimark) de victimización desde marzo de 2010.
"Nos sentimos orgullosos de este primer año de gobierno, y nuestro balance es extraordinariamente positivo (...) marca un punto de inflexión entre el Chile de ayer y el del mañana. Veníamos de un país con indicadores negativos, con cifras a la baja", dijo el presidente de la UDI, Juan Antonio Coloma.
Reconstrucción
Tras el 27/F, el proceso de reconstrucción de las zonas más afectadas por el terremoto y tsunami, se transformó en una de las prioridades del gobierno. Y a pesar de las polémicas que se vivieron en torno al porcentaje de avance, en medio da la primera conmemoración de la tragedia, en el Ejecutivo resaltan los resultados en cuatro áreas: Educación, Vivienda, Salud y Obras Públicas.
El reingreso a clases de 1.250.000 niños y jóvenes, cuyos colegios se vieron destruidos o afectados, en sólo 45 días; la asignación de más de 100 mil subsidios, 4.500 casas entregadas, 45 mil obras en ejecución; el reestablecimiento del 94% de las camas hospitalarias perdidas por el terremoto; así como la recuperación del 100% de los aeropuertos y de las obras viables, incluidos caminos y puentes, se encuentran entre los principales logros.
Economía
Un crecimiento económico expansivo y una mayor creación de empleos eran dos de los principales ejes de campaña. Durante el primer año de gobierno fue uno de los puntales de la administración piñerista, al punto que el propio Presidente, en más de una ocasión, incluso en el extranjero, no perdió oportunidad en comparar los resultados de su gobierno con los legados por su predecesora, la ex Presidenta Michelle Bachelet.
Y es que el 5,2% de crecimiento en 2010 y los más de 400 mil empleos que se lograron crear, responden con creces a la proyecciones que Piñera prometió antes de llegar a La Moneda: crecimiento de 6% y 1 millón de empleos nuevos para su cuatrienio.
Otras medidas acertadas, sostienen en el oficialismo, fueron las alzas impositivas a las grandes empresas y a las mineras, que "demostraron" la independencia del gobierno frente a los grupos de presión empresariales, a pesar de las insistentes críticas que veían a la administración como el "gobierno de los empresarios".
Gestión Política
Es quizás una de las grandes falencias que, sin dudas, reconocen en RN, la UDI e incluso en el propio gobierno. Casos como el alza de gas en la Región de Magallanes –que no fue socializada con los partidos-; y la demora en la toma de decisión sobre el futuro de la intendenta de la Región del Biobío, Jacqueline van Rysselberghe, quien confesó haber "inventado una historia" para conseguir beneficios habitacionales, son ejemplo (sostienen) del deficiente manejo político del Ejecutivo en dos de las principales crisis que debió enfrentar.
En la UDI, tanto en público como en privado han achacado buena parte de los problemas al ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, por no "ejercer" un liderazgo claro en el gabinete. A este, a su vez, se lo criticó por su poco peso político ante el Congreso.
Además se sostiene, que el gobierno no se ha coordinado bien con los partidos ni con los parlamentarios. Varias veces durante el año pasado, las directivas de la Coalición por el Cambio reclamaron que el comité político de los lunes –reunión de análisis e información entre ministros, congresistas y presidentes de partidos realizada en La Moneda- escasamente servía para coordinar la tarea legislativa y política del oficialismo.
En esta línea es que también se ha cuestionado el protagonismo, "excesivo" según algunos, que ha tenido el Presidente Piñera durante su primer año en La Moneda. Los impasses con el ex técnico de la selección chilena, Marcelo Bielsa, su aterrizaje forzoso en helicóptero, más otros problemas como la venta de su participación en varias empresas, han generado "problemas gratis" al Ejecutivo y una notoria baja las encuestas de opinión, tema preocupante en La Moneda.
"Es un fenómeno complejo, pero el problema sería que no hubiéramos cumplido lo que prometimos (…) Espero poder conversar, comunicarnos mejor con la ciudadanía, para que comprendan los esfuerzos que se están haciendo y que este es un gobierno a 4 años", dijo ayer el ministro Hinzpeter sobre la disminución del apoyo ciudadano.
Lo que viene: el año de las grandes reformas
No hay dos opiniones en el oficialismo, el 2011 será el año en que el gobierno se juegue su "capital político", con la materialización de las principales reformas estructurales que la administración piñerista pretende implementar. Entre ellas, la eliminación del 7% de salud para los jubilados, el Ministerio de Desarrollo Social, el proyecto para instaurar un Ingreso Ético Familiar (IEF) para las familias más pobres, y las reformas políticas (voto voluntario, inscripción automática, voto para los chilenos en el extranjero).
La puesta en marcha de estos proyectos, aseguran en RN y la UDI, revertirán la tendencia a la baja que los trabajos de opinión (sobre todo Adimark) han mostrado de forma sistemática desde noviembre.