Mitos y realidades de la congestión en los peajes
Laurence Golborne
Ministro de Obras Públicas
En este extenso feriado de Fiestas Patrias, quienes salieron de Santiago vivieron largas horas de congestión para llegar a sus destinos. Esta postal se viene repitiendo en los últimos años cada vez que hay más de tres días feriados, y, en medio del enojo de los automovilistas, se mezclan mitos y verdades sobre lo que puede o no puede hacer el MOP para mejorar la situación.
Partiendo por los mitos, el principal es que la congestión en la salida de Santiago se debe exclusivamente a la existencia de peajes manuales. Si bien en los peajes se reduce significativamente la velocidad de traslado, existe un problema real de capacidad de las vías. Ello, por un motivo muy simple: las carreteras no están construidas para los episodios de flujo peak durante el año. Tener carreteras para cinco o seis episodios al año significaría una inversión considerable que pagarían todos los chilenos, y no sólo aquellos que salen de Santiago.
¿Se está haciendo algo para mejorar esta realidad de capacidad vial? Sí. El MOP se encuentra trabajando en el Plan Integrado de Desarrollo de Autopistas (Pida), el cual, entre otras cosas, hace más expedita la entrada y salida de vehículos desde y hacia la Región Metropolitana. El incremento del parque automotor al 7% anual, producto del mayor crecimiento y desarrollo económico del que goza el país, es una realidad que debemos afrontar para evitar un colapso vial; sin embargo, alcanzar una capacidad adicional requiere cinco años, considerando diseños, ingeniería, licitaciones y construcción.
Hemos avanzado mucho en estos últimos dos años. Por ejemplo, en la ruta Santiago-Talca ya está diseñado un nuevo puente de seis pistas para el río Maipo y las terceras pistas hasta el bypass de Rancagua que estarán construidas hacia el 2015. Así, también, se ha comenzado la construcción de las terceras pistas desde Av. Departamental hasta la Ruta 5 Sur, que incluye inversiones relevantes en materia de seguridad, pero lo que no se inició hace cinco años no puede estar operativo hoy.
La instalación del TAG Interurbano en las salidas de Santiago para hacer más expedito el paso de los vehículos por las plazas ya es una realidad. Se encuentran funcionando los pórticos del peaje Angostura, y luego comenzará la marcha blanca en la Ruta 68. Durante 2013 esperamos implementar este sistema en rutas Santiago-Los Andes y Santiago-San Antonio.
El segundo mito que suele surgir con mucha fuerza durante estas fechas es que el MOP puede obligar a las concesionarias a levantar las barreras del peaje en caso de generarse congestión. Lo cierto es que los contratos con las concesionarias, firmados en la década pasada, no facultan al MOP a ordenar el levantamiento de barreras. Así, esta posibilidad queda en manos de la voluntad de las empresas.
La experiencia nos ha mostrado que las cosas pueden hacerse mejor. Por ello, el MOP optó por estudiar cómo perfeccionar la regulación de tiempos de espera para incorporar a los nuevos contratos. Se analizaron las alternativas existentes en algunos países, como Argentina, Irlanda y España, y se hizo, además, un análisis económico para comprender las implicancias de diferentes métodos de sanciones.
En base a lo anterior se definió una nueva regulación, la cual define un estándar máximo de espera en los peajes, y en caso de que no se cumpla este tiempo de espera definido, sanciona a la empresa concesionaria de manera proporcional al impacto negativo que causa.
De esta manera, se entrega la responsabilidad del cumplimiento del nivel de servicio a la concesionaria, incentivando que evite la congestión de manera proactiva y realizando mejoras en gestión y tecnologías para entregar el estándar de servicio definido.
Esta nueva regulación se encuentra incorporada en las próximas concesiones de Rutas del Loa y La Serena-Vallenar, marcando un hito importante en materia de servicio al usuario y un precedente sobre el camino que está tomando el MOP en cuanto a los estándares de las carreteras concesionadas, estableciendo hoy las salvaguardias que no se avizoraron en el pasado y que permitirán al MOP no resultar cautivo de regulaciones como las que hoy se aplican en las demás concesiones.
Pero mas allá de estas medidas, la pregunta que cabe es: ¿quién es el responsable de la planificación de largo plazo de la infraestructura vial? Eso no está claro. El Ministerio de Transportes está creando una División de Planificacion y Desarrollo que tome esta responsabilidad, coordinando con Sectra, Minvu, MOP y otros servicios involucrados. Debemos potenciar esta idea y desarrollar planes integrados de conectividad terrestre, que potencie servicios ferroviarios o autopistas según las necesidades.